Nada es justo o injusto

Leí hace unos días sobre Rogerio Bacon, un tipo muy religioso y pinche estudión del siglo XIII que aseguraba que la filosofía y las ciencias no tienen más sentido que explicar la verdad revelada en las Escrituras. Esto, si se quiere discutir, implicaría 60 cafés de por medio. Pero a lo que yo quería llegar es a que Don Bacon decía que Dios había enseñado a filosofar a los hombres, pero la malicia humana había producido que Dios no se manifestara plenamente y degeneraran en el error. Por esto, y aquí viene lo que yo quería decir pero sin todo el preludio anterior no entenderían, es que la sabiduría verdadera se encuentra en los primeros tiempos y por eso hay que buscarla en los filósofos antiguos.
Me escandalicé.
Quizás porque en estos tiempo nosotros, los jóvenes adolescentes (y no tanto, eh) generalmente tenemos una actitud contestataria al oír frases que aludan a las glorias pasadas, en contraste a las degeneraciones presentes. Pero luego, osea, ayer, leía a Truyol y Serra (SÍ, SIEMPRE VOY A CITAR A LOS AUTORES) y el hombre citaba a Arquelao. Este filosofo presocrático me decía, más allá de las traducciones y de los veintitantos de siglos que nos separan "Nada es justo o injusto, bueno o malo por naturaleza, sino únicamente por ley o costumbre, o sea, por arbitrio humano." Ya quisiera ver la cara de Bacon, al leer a este antiguo filosofo... ¿es que esa frase no podría dar por tierra la moral católica, Rogelio?

WILLKOMMEN!

¡Nunca estuve de acuerdo con crearme un Blog! Se me aparecían como niños chiquitos que había que mantener vigilados. En fin, hoy me desperté con miles de cosas para hacer, memorizar, y vivir. Pero las estoy dejando de lado. Y supongo decidí tener este blog ante la predisposición de mi dedo índice derecho, ya que si preguntando se llega a Roma, yo clickeando llegué a Clamores Intrínsecos.